lunes, 12 de octubre de 2009

LLEGÓ EL JEFE A PONER ÓRDEN


Se buscaba un “Jefe”… Cuando River más lo necesitaba, Leonardo Astrada aceptó volver al club. Cuatro años después de aquella renuncia en la cancha de Banfield, el “Negro” regresó para hacerse cargo del plantel “millonario” en el momento más caliente de los últimos años. “¿Cómo no iba a darle una mano a River? Muchos me decían, no te conviene o tenés que pensarlo bien, pero la verdad es que yo pasé gran parte de mi carrera en el club, viví cosas muy importantes y sentí que no podía darle la espalda en esta situación”, contó el flamante entrenador.
-¿Qué viste del equipo en estos últimos meses?
-Me parece que no se pudo mantener una estructura sólida por diferentes circunstancias. Este es un plantel joven, al que le falta experiencia, pero tiene jugadores con la capacidad necesaria para ponerse esta camiseta. Habrá que darles tiempo, aún sabiendo que se necesitan resultados en lo inmediato. Creo que en los últimos tiempos, salieron muchos valores de las inferiores que se deberán afianzar porque les veo un futuro interesante.
-¿En qué vas a hacer hincapié en estos primeros días?
-Lo más importante es buscar las posibilidades para salir de esta situación. Tenemos que sumar todos para que River salga adelante. Seguramente que lo anímico es importante, pero también habrá que mejorar en lo futbolístico. Hay que trabajar en la concentración y en que se puedan hacer dos pases seguidos. Seguro que los más jóvenes deberán apoyarse los referentes para recuperar la mística de River.
-¿Hablaste con Ortega por algún mal entendido que hubo en tu gestión anterior?
-Sí, ya se aclaró todo. Eso pasó cuando él jugaba en Newell´s y creyó que nosotros no lo queríamos en River. Le explicamos en aquel momento que no era una cuestión del cuerpo técnico. Lo entendió. Después, no pudimos sentarnos a hablar porque nosotros nos fuimos del club y seguimos trabajando en otros lugares. Ariel también estuvo en Mendoza y no nos juntamos. Ahora, seguro habrá tiempo para charlar más, pero el tema fue aclarado en su momento.
-¿Te sorprendió el rendimiento de Almeyda?
-No, yo lo conozco y se que es un gran jugador y tiene un físico privilegiado. Además, lo veía seguido y sabia que estaba para jugar. Mi única duda era el tiempo que pasó inactivo, sin jugar profesionalmente. Es muy importante para el equipo. Ojalá siga en este nivel y pueda contagiar a sus compañeros. Hay mucho para trabajar en el grupo.
-¿Te preocupa el estado físico de Gallardo?
-Se que Marcelo está bien y se ha recuperado de lesiones complicadas. De a poco, él irá tomando ritmo futbolístico y será fundamental para levantar futbolísticamente al equipo.
-¿Cómo lo vas a manejar a Cristian Fabbiani?
-Es un jugador con gran capacidad. El tema es que la camiseta de River es distinta a otras y él lo tendrá que asumir. Creo que si se compromete con el equipo, se concentra en el juego y se preocupa por su estado físico, va a ser importante. Me voy a sentar a hablar con él sobre todas estas cuestiones. También debe estar sufriendo la adaptación al club, eso te lleva entre seis meses y un año. En realidad, se que tendré que charlar con todos.
-¿Cómo fue el reencuentro con Aguilar, después de la renuncia en la cancha de Banfield?
-Siempre mantuvimos el diálogo y quedamos con una buena relación. Yo me arrepentí de no haberme ido antes, cuando quedamos eliminados de la Copa. Sabía que no me quedaba demasiado margen para el error y terminé dejando el cargo en un momento complicado. Igual, eso ya pasó. Hoy tengo más experiencia y aprendí de los errores. Todo el cuerpo técnico maduró y creció, me parece que lo vamos a demostrar. Seguiremos trabajando con Hernán Díaz, Javier Sodero y Ernesto Corti. Ahora, se suma el preparador físico, Facundo Peralta, que estuvo con nosotros en Colón.
-Se te nota muy optimista
-Sí, se que River tiene plantel para dar vuelta esta situación y nosotros estamos con ganas de colaborar y contamos con la entereza necesaria en todos los aspectos. Queremos que los jugadores muestren todo su potencial y también hace falta el apoyo dirigencial. Los hinchas siempre acompañaron y eso que el equipo no obtuvo los resultados deseados. Acá hay que convencerse de que esto se soluciona entre todos.

EDITORIAL


La partida de Gorosito le dio forma a otro fracaso en la vida futbolística de River. No hacía falta otra caída bochornosa para notar que la continuidad del técnico era insostenible. Nada mejor que el último partido para graficar las incoherencias de un Gorosito que nuevamente hizo todo mal. Desde anunciar a un periodista, y no a los dirigentes que lo fueron a buscar y lo pensaban sostener en el cargo hasta el final de su contrato, su partida a 48 horas del cruce ante San Lorenzo, hasta hacer variantes inexplicables desde lo táctico, en un partido que encontraba a River controlando el juego, con un excelente trabajo de Bou y Villalba, entre otros.
Pero, la derrota en el Bajo Flores no sólo debe marcar el fin de ciclo del técnico, sino que atrás de él hay varios que deberían seguirlo en su camino hacia afuera de Núñez. Uno de ellos es sin dudas Cristian Fabbiani que, gracias a la obstinación de Gorosito, siguió teniendo oportunidades en el equipo y una vez más demostró su falta de compromiso. En un momento en que tuvo todo servido para recuperar la simpatía de la hinchada y de sus compañeros, arrojó todo por la borda tirando un taco estúpido, en lugar de romperle el arco a Migliore y establecer el 2 a 1.
Similar fue la situación de Cabral que se CAGÓ en el esfuerzo de sus compañeros y cometió un penal infantil, indigno de un jugador de primera división. Al igual que en otras oportunidades, el ex Racing le facilitó la tarea al rival y condenó las chances de un River que aún herido intentó luchar contra la adversidad.
En medio de este marco se encuentra la gente, a la cual ya no se le puede pedir nada. Pero es importante que el hincha, que seguramente va a querer descargar su bronca en el Monumental, entienda que sería injusto recibir al equipo con gestos de repudio. Hoy comienza una nueva etapa y Leonardo Astrada, el jugador más ganador en la historia de nuestro club, merece todo nuestro respaldo y apoyo. El verdadero hincha de River volverá a apoyar a un equipo que necesita sumar puntos para poder pelear la punta o clasificarse para la próxima Copa Libertadores.
Por otro lado queremos dedicarle un párrafo aparte a Héctor Cavallero, actual responsable de prensa de nuestra querida institución. Te aseguramos que tus intimidaciones no nos amedrentan y que en diciembre seguiremos TRABAJANDO como hasta el día de hoy. Tenemos más de 20 años de profesión, en algunos casos, y NUNCA pusimos un kiosco en River Plate. NUNCA hicimos negocios con el club. NUNCA acosamos a nadie, porque nos consideramos libres de opinión. NUNCA evadimos, ni la responsabilidad profesional ni la comercial... Siempre fuimos respetuosos de las autoridades del club. Siempre fuimos leales a nuestras convicciones. Sabemos que River no es una oficina de atención al público o a clientes de paso. River es la razón de nuestras vidas. Y, además, quedate tranquilo Héctor, que el año que viene seguiremos viniendo al club. Y podemos mirar a todos a los ojos. Ojalá puedas afirmar algo de todo lo que nosotros acabamos de decir. Ojalá que alguna vez intentes ser un verdadero caballero.
Por último queremos decirle a nuestros lectores que, con este número, FSP cumple su edición Nº 100. En una situación normal, esto sería motivo de celebración y festejo, pero quienes hacemos esta revista somos verdaderos hinchas de River y por ende somos incapaces de sentir satisfacción personal cuando en nuestro club las cosas no están saliendo bien. Por esto decidimos dejar de lado nuestra satisfacción personal y acercarles otro número repleto de propuestas políticas, para que puedan encontrar en nuestras páginas la mayor cantidad de información para tomar una decisión acertada en las elecciones. El socio tiene que nutrirse de todo y luego discernir entre los proyectos serios y las falsas promesas electorales.